domingo, 25 de agosto de 2013

El avispero sirio

Los EE.UU. están evaluando la posibilidad de una intervención militar en Siria (conjuntamente con el Reino Unido y Francia) como respuesta al supuesto uso por parte del gobierno sirio, de armas químicas (todavía en calidad de supuesto, presunto, posible...).
Muy bien, ¿y que pasaría si después resulta que las armas químicas son como las de "destrucción masiva" iraquíes? ¿pedirán disculpas?
Ahora, después de la intervención y, supongo la eliminación del régimen de al-Assad (¿lo juzgarán también), ¿a quiénes entregarán el poder? ¿A la Coalición Nacional, que más que coalición es un collage mal pegado de etnias, culturas y grupos religiosos peor avenidos? Y una vez que, supongo, la Coalición esté en el poder, ¿Qué esperan hacer, Alá los ampare, con el Grupo Patriótico Sirio, Al-Nusra y el Concejo Nacional Kurdo, que tienen sus propios intereses, y muy distintos por cierto?
Viendo las noticias, desde nuestra perspectiva occidental, es muy fácil estremecerse, horrorizarse, lamentar y compadecer. Es muy fácil decir: "Rechazamos la violencia" o "Alguien debiera hacer algo", pero "rechazar" no aporta nada y si podemos imaginar quién debiera ser ese "alguien" estoy seguro que nadie sabe en que debiera consistir ese "algo" y si estamos dispuestos a pagar el costo de solucionar el problema de los sirios habiendo tantos problemas en casa (por mucho que nos conmuevan las muertes).
Si simplificamos las cosas todo está claro, los "buenos" pelean contra los "malos", pero ¿son así de simples las cosas? ¿podemos determinar desde lejos quién es el que tiene la razón, quién merece ganar, quién merece perder y que hay que hacer con los perdedores?.

No es tan sencillo, el conflicto sirio tiene sus raíces hundidas en las profundidades de la historia y sus ramas abiertas a todos los conflictos humanos. Es difícil para nosotros captar en toda su dimensión lo que significa ser chiita, sunita o alauita y las relaciones y conflictos que entre ellos se generan ¿qué tan placentero es ser minoría alauita entre una mayoría chiita? ¿o ser cristiano en medio de una mayoría musulmana? ¿que siente un kurdo, avasallado durante siglos por todos sus vecinos? Yo digo que no podemos juzgar, o sí, podemos juzgar, pero de manera parcial, prejuiciosa e ignorante, no por culpa nuestra, por cierto, sino porque se trata de un mundo que no conocemos.
No creo que sea tan difícil entrar en Siria, lo que no entiendo es como esperan salir después, porque viendo los resultados de anteriores intervenciones en otros sitios no veo por donde puede resultar algo positivo.

Por último, me quedan flotando en el aire algunas de preguntas tontas:
1. ¿Por qué 50 niños muertos por un gas neurotóxico ameritan una intervención, pero no lo hacen 50 niños destrozados por granadas explosivas? ¿Es porque el gas no es "humanitario" y las bombas sí lo son?
2. ¿Los sirios inventaron las armas químicas? ¿También las fabrican y las exportan?

El problema es que no es bueno hacer preguntas si no nos van a gustar las respuestas, por esta podría encontrarse en las palabras de Plauto: Lobo es el hombre para el hombre.

Jenofonte

9 comentarios:

  1. Jenofonte, nos presentas un tema de gran envergadura.No creo estar a la altura de su importancia para emitir un juicio sobre este conflicto, pues la información de política internacional que nos llega no siempre es objetiva, ni siquiera completa.
    Dicho esto, solo puedo hablar de lo que otros han dicho ya, sobre la hipocresía de los gobiernos a la hora de apoyar acciones a favor o en contra de determinado país; en este caso,de Siria.

    -Ambas posturas se adoptan por intereses económicos y para ampliar áreas de influencia de las grandes potencias.Así, Irán,Rusia,Turquía y China se oponen a una intervención armada en la zona.Occidente vacila, escarmentado por la guerra de Irak; y EE.UU, para demostrar que cumple su palabra -por aquello de "la negra honrilla"- amenaza con lanzar unos cuantos misiles con los que destruirá edificios gubernamentales,que no solucionarán el problema de fondo, ni evitará la masacre de la población civil.

    -Como tú dices, Jenofonte, ¿Por qué ahora se alarman y otras veces no?
    -¿Por qué censuran la utilización de armas químicas que ellos mismos fabrican?
    -¿Por qué se fabrican las bombas de racimo y las minas antipersona?
    Occidente es un arsenal peligroso y sus discursos éticos una pamplina.

    Por otra parte, el conflicto socio-político en Siria ofrece una disyuntiva difícil por los enfrentamientos, de verdadera guerra civil, entre los grupos religiosos que forman la oposición; fanáticos, cainitas,con los que no se vislumbra un régimen político democrático.
    Tendrán que pasar muchos años para que los países árabes tengan una primavera con flores en lugar de con sangre.Pero son ellos los que deben dirigir su destino. No soy partidaria de imponer gobiernos por la fuerza de las armas.

    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡¡Ay, ay !! ¿Pero qué dije? ¿Que Turquía se opone a la intervención?...Pido disculpas por el error.Turquía estuvo desde el comienzo a favor de castigar al régimen sirio y además es a través de su amplia frontera por donde se suministran armas a la oposición.
      Disculpad este lapsus. No sé en qué estaría pensando.

      ¿Y por qué alguien no me corrigió? Si vuelvo a equivocarme, os pido que me lo digáis.

      Saludos a todos.

      Eliminar
    2. Hace tres días quise corregir el error de incluir a Turquía entre los aliados de Siria, ya que precisamente fue el primero que pidió una intervención y es a través de su frontera por donde llegan las armas para los rebeldes.

      Como veo que no aparece la rectificación -misterios de Internet-, vuelvo a intentarlo, ya que no me gusta, nada de nada, permanecer en el error sin que nadie me haya corregido.

      Disculpen el lapsus.

      Saludos

      Eliminar
  2. Este problema tiene tantos detalles que es muy difícil de conversar, pero en un momento sucedió que donde mirase había una noticia acerca de Siria y se me ocurrió que podía escribir algo acerca de mis ideas al respecto, al margen de si fueran o no pertinentes.

    La magnitud del conflicto en Siria es enorme, claro, para los sirios, porque lo que es a nosotros poco y nada nos afecta por lo menos directamente.
    Yo creo que el mayor efecto es el que producen los medios de comunicación. Hace doscientos años los titulares de los periódicos publicaban con meses de atraso las noticias del mundo lejano: Disturbios en Siria, miles de muertos. Hace cien, las noticias ya tenían solo un par de días de atraso y estabancondimentadas con ese gran invento que es la fotografía. Hoy, las noticias son instantáneas y muy gráficas, tal vez demasiado. Antes una foto podía mostrar una vista lejana de un cierto número de cuerpos yacentes, hoy muestra un primer plano de un niño muerto, imágen por cierto mucho más impactante.
    He visto a las personas conmoverse ante esas imágenes, cómo no hacerlo, si están tomadas de manera tan efectista. Pero veo que las mismas personas capaces de llorar por un niño sirio muerto, también son capaces de pasar por el lado del niño harapiento que le pide una moneda sin verlo, es decir, sin conmoverse en lo más mínimo. Claro, si ve la imagen de un niño sirio puede decir: ¡debieran hacer algo!, pero si viera al niño en su propia calle tendría que decir: ¡debo hacer algo!, y eso es más dificil que simplemente ver las noticias.

    ResponderEliminar
  3. El conflicto Sirio también nos muestra, una vez más,la poca autoridad que tiene el Consejo de Seguridad de la ONU. Los países miembros no tienen reparos en hacer caso omiso de las recomendaciones de este organismo que se entiende que debería ser la máxima autoridad en las relaciones internacionales.Se demostró en Irak y se vuelve a demostrar ahora en el tira y afloja con los inspectores que viajaron a Siria, sobre atacar sin autorización, antes de verificar, presionando para que la objetividad y la prudencia se reduzcan a mera formalidad.
    Tampoco estoy de acuerdo en que algunos países tengan derecho a vetar cualquier resolución aunque esta pueda ser justa; ese veto responde siempre a intereses políticos y económicos, al margen de lo que es o no moralmente justo.
    EEUU vuelve a presentarse como gendarme mundial, dominador, represor, y también actúa por interés.

    Las imágenes difundidas, escalofriantes,forman parte de la manipulación de nuestras emociones para apoyar la intervención armada. Intervención que no se hará para salvar vidas de la gente común, sino los intereses económicos que se tienen o se derivarán de dicha intervención.

    Un interesante tema; difícil de abordar en profundidad, pero que amplía la temática de esta tertulia.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  4. Creo que el problema este de las relaciones entre los países es muy complejo. Siempre habrá Estados dispuestos a agredir a otro, y siempre por los mismos motivos, la necesidad de apropiarse del territorio o de los recursos ajenos.
    Normalmente se dejaba que los países arreglaran sus diferencias por su cuenta, ya sea cediendo o luchando, pero la Primera Guerra Mundial, convertida en mundial por la intrincada red de alianzas entre naciones, llevó a pensar que era necesario un organismo que permitiera mediar, arbitrar los conflictos. La Sociedad de las Naciones no evitó la Segunda Guerra, entonces se creó la ONU. Se pensó como una organización que debía regular el armamento y mantener la paz, aunque estos últimos conceptos entren en la categoría de lo teórico ¿cómo se regula el armamento? ¿cómo se mantiene la paz?. Se creó la Fuerza de Paz de la ONU como una fuerza que tendría que disuadir a los combatientes en un conflicto ¿disuadir? ¿cómo se disuade a quién no quiere ser disuadido, si no es por la fuerza? Entonces hay que usar la violencia para convencer a alguien de que no la use, un contrasentido.
    Ahora, como esto de las Fuerzas de Paz no da mucho resultado, los EE.UU. y su instrumento, la OTAN, usan directamente su ejércitos para imponer la fuerza, donde lo consideren necesario, para decidir el triunfo de la facción beligerante que ellos consideren debe imponerse.
    Así, en una guerra civil en Siria, donde una facción rebelde se está enfrentando al gobierno, se decidió que los rebeldes deben ganar y el gobierno debe perder. Esto porque el gobierno es una dictadura, es anti democrático, sin considerar que los rebeldes de ninguna manera pueden garantizar que el siguiente gobierno sirio llegue a ser democrático en el concepto occidental del término.
    Entonces, todo esto me parece un gesto matonesco, abusivo, de un grande sobre un pequeño, usando el viejo truco de fabricar un pretexto. Antes se usaba un Maine, ahora las Armas de Destrucción Masiva, qué vergüenza, todo porque los amos del mundo quieren tener el control sobre esa zona.

    ResponderEliminar
  5. No soy partidario de acciones armadas ni dentro ni fuera de nuestro país y tampoco de que se actúe unilateralmente, rompiendo la credibilidad de la ONU que debería ser el garante de la paz.

    ¡Y ahora, Rajoy, dice que respalda "la acción contundente" de EE UU en Siria!. ¡Como si no hubiera mejores proyectos que respaldar en nuestro país, agobiado por los recortes en sectores básicos para el bienestar social.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Bueno, parece ser que se busca una salida que no sea la intervención armada.Realmente, es tan complicada la situación interna de Siria, que una guerra no interesa a nadie.

    ¿Creéis que se llegará a una entente?

    ¿Qué intereses mueven estas negociaciones?.

    Me interesa este debate. Gracias a todos.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  7. ¿Por qué los que mueren en la guerra civil en Siria son más importantes que los que murieron en Yemen, en Nigeria, en Beluchistán o en el Congo?
    ¿Qué intereses mueven la intervención de las potencia europeas sino las mismas que la movieron desde el tiempo de las cruzadas hasta el desmembramiento del Imperio Turco en 1918?
    Para todo hay un cielo y un infierno, si la guerra es un infierno para quienes la sufren es en cambio un paraíso para los fabricantes de armas.

    --El tiempo y el dinero pueden convertir en legal lo ilegal y en verdad la mentira.
    (El rey Juan II de Aragón, en Isabel, capítulo 7)

    ResponderEliminar